jueves, 14 de septiembre de 2017

El estrés del cuidador

El estrés del cuidador es frecuente en cuidadores de personas con discapacidad. Puede ser abrumador cuidar de un ser querido con algún trastorno, pero demasiado estrés puede ser perjudicial para ambos. Siga leyendo para conocer los síntomas y formas de evitar el agotamiento.


10 SÍNTOMAS DE ESTRÉS DEL CUIDADOR
1. La negación de la enfermedad o trastorno y su efecto sobre la persona que ha sido diagnosticada.
2. La ira de la persona con el trastorno, la ira que no existe cura o la ira que la gente no entiende lo que está sucediendo.
3. Aislamiento social de amigos y actividades que una vez que producían placer.
4. La ansiedad sobre el futuro. ¿Qué sucede cuando se necesita más atención de lo que puedo ofrecer?
5. Depresión que comienza a romper su espíritu y afecta su capacidad para enfrentar la situación.
6. El agotamiento que hace que sea casi imposible completar las tareas diarias necesarias.
7 Insomnio causado por una lista interminable de preocupaciones.
8. La irritabilidad que lleva a cambios de humor y desencadena respuestas y acciones negativas.
9. La falta de concentración que hace que sea difícil llevar a cabo tareas familiares.
10. Los problemas de salud que empiezan a pasar factura mental y física.
Fuente: www.serdomas.es

martes, 15 de agosto de 2017

Los retos de ser madre de una niña con necesidades especiales

Por: Carolina Cervantes

Lo sé, tengo abandonado a mi blog, los últimos meses han sido complicados, mi ánimo y mi estado de salud no han sido los mejores, gracias a Dios Nana ha estado bien, la estadía en la clínica fue corta y eso es lo que me mantiene en pie.

Ayer una señora que no me conoce personalmente pero hace mucho me sigue en redes, me escribió y como muchas otras personas a lo largo de estos años que he tenido el blog, me hablan destacando que soy mamá de una niña con necesidades especiales y que por el esfuerzo adicional que eso supone sienten admiración por mi labor. En alguna entrada  anterior lo dije, no me siento cómoda con ese tipo de comentarios, no es que sea malagradecida ni mucho menos, es solo que esa es mi vida, es mi labor, lo hago con todo el amor del mundo porque mi hija se merece todo lo que hago y mucho más.
Es obvio que ser mamá de Mariana tiene sus días buenos y sus días malos, días en que me provoca salir corriendo y dejar todo botado porque literalmente no sé qué hacer y otros en que el miedo desaparece y las lágrimas de tristeza mágicamente se convierten en lágrimas de felicidad cuando veo alguno de los muchos logros que tiene Nana a diario, esos momentos hacen que todo valga la pena y ahí es cuando me digo "No puedes huir, no debes tener miedo, ella te necesita, ella es tu motor para ser feliz, estás haciendo las cosas bien porque mientras ella sonría y te de besos babosos el resto del mundo no debe importar".


Cuando tiene esos grandes avances en mi casa todo se revoluciona y mis padres y yo corremos a abrazarla y a besarla, muchas veces lloramos de felicidad y le damos gracias a Dios porque nos permite día a día ser su guía en este camino que tiene tantas recompensas.

El miedo es uno de mis mayores limitantes como mamá, mi cabeza empieza a maquinar, a suponer, empieza a creer en mil cosas que ni siquiera han sucedido. El miedo a que se caiga, a que se vea discriminada por otros niños, a que no se sienta aceptada, a que no pueda hacerle entender a los demás lo que siente y lo que necesita, a que su percepción de si misma la haga sentir menos, no sé, son mil cosas ... El miedo es mi peor enemigo.


Alguna vez hablaba con mi amiga @linarouge y me decía que soy yo la que le pongo los límites, que Nana es una niña feliz y que me estoy preocupando demasiado. Como siempre sus palabras fueron sabias y calmaron mis dudas. Prometo olvidar el miedo y afrontar este desafío como lo he hecho hasta ahora, con amor y fortaleza, eso es lo que Nana se merece y ella a cambio me recompensa con su hermosa sonrisa.

viernes, 30 de junio de 2017

Nuestra experiencia con el dengue


Hace ya 3 años Nana empezó con una fiebre altísima, con nada se le bajaba, la bañaba, le daba medicamentos, le ponía pañitos de agua y nada... Mi mamá y yo estábamos ya desesperadas, incluso como tiene un mayor riesgo de convulsiones por sufrir de epilepsia, la fiebre le causó una crisis, terminamos en urgencias, angustiadas y sin tener idea de qué pasaba, porque la fiebre era el único síntoma notable que presentaba, lloraba mucho, estaba irritable, tenía la boquita seca, no quería comer, me partía verla así y no tener idea de que pasaba. Tras estabilizarla y prácticarle varios exámenes de sangre la pediatra nos dijo que tenía las plaquetas muy bajitas y que eso significaba que ¡TENÍA DENGUE!

Por sus antecedentes y su diagnostico de base (parálisis cerebral), decidieron dejarla hospitalizada, para estar pendiente de sus plaquetas, de la fiebre y de las posibles crisis consulsivas. Me imagino que recuerdan que vivimos en Barranquilla, una zona tropical donde es una enfermedad bastante común, pero jamás imaginé que la niña se vería afectada por ella, porque suelo ser bastante cuidadosa con el uso del repelente. Mi mamá pasó 15 días con la niña en la clínica, porque adivinen a quién YO le dio varicela justo en ese momento y no se pudo acercar a la niña por 45 días... Pero esa es otra historia fea y muy larga. 
A partir de ahí quedé traumada con los mosquitos, todo el tiempo usamos repelente y más cuando estamos al aire libre, porque es una de las tantas formas de prevenir el dengue.

¿Por qué les cuento toda esta horrible experiencia? Para que tomen conciencia de que a ustedes también les puede pasar, deben cuidar a sus peques, estar siempre alerta cuando vayan a lugares húmedos y al aire libre, siempre utilizando repelente. Si visitan tierra caliente o van de campamento, usen toldillo para dormir. En sus hogares no dejen agua acumulada en lugares oscuros y húmedos, son el nido perfecto para los mosquitos que transmiten el dengue. Puede que sea una frase muy cliché, pero es mejor prevenir que lamentar. 

Si deseas mas información sobre el dengue y como prevenirlo puedes visitar:

lunes, 22 de mayo de 2017

Sin pensarlo dos veces

Por: Carolina Cervantes 

¿Si pudieran retroceder el tiempo y cambiarlo todo... Cambiar tu empleo, las decisiones que tomaron en algún momento y no fueron las mejores, cosas que dijimos, cambiar a sus hijos con necesidades especiales por un niño sano, lo harías? Mi respuesta a esa pregunta es un rotundo NO! No cambiaría a Mariana por nada en el mundo, así como estamos somos felices, no hay nada que me haga dudarlo y mucho menos desearlo. La amo, la acepto tal y como es, no me arrepiento de nada.


Y si, para algunos puede ser raro y hasta ilógico preferir a una niña a la que hay que cuidar el doble, la que se enferma con frecuencia, por la que he llorado mil veces llena de impotencia porque su salud se deterioraba y no había nada que yo pudiera hacer, que no camina del todo sola, que debo alimentar, bañar, vestir, todo como si fuera una bebé (Que para mi lo es). Todo eso requiere de un gran esfuerzo, cualquiera se cansaría de hacerlo, pero así suene cliché, el amor es la clave, el amor que siento por mi hija y el amor que ella me profesa son los que me dan fuerza para sobrellevar todo esto.



Todas las mamás cuando estamos en embarazo esperamos un hijo sano, nos imaginamos mil cosas, sus cumpleaños, el primer día de escuela, cuando vayan a la universidad, etc... Pero cuando la discapacidad llega a nuestra vida es como si fuéramos en un auto a toda velocidad y nos estrelláramos con la pared, todo cambia.




Ser madre de un niño en condición de discapacidad tiene sus días malos, días en que quieres salir corriendo y dejar todo botado porque sientes que no puedes más, días en que todo es cansancio, caos, frustración, Pero hay otros días en donde el orgullo no nos cabe en el pecho, la felicidad nos inunda, como madres especiales aprendemos a valorar cada pequeño avance que nuestros hijos y los celebramos con bombos y platillos, aprendemos a ser agradecidas con la vida.



No cambiaría nada de estos 9 años en los que he sido la mamá que Mariana, es duro, obvio, pero ella tiene poderes sobrenaturales, calma tormentas solo con sonreír, gracias a ella soy fuerte, compartimos como cierta energía, algo que nos mantiene juntas, Estar a su lado me llena de felicidad, ella me cambió y ahora soy la mamá que ella merece. Yo no le tengo miedo a la discapacidad, estoy segura, sin pensarlo dos veces, no cambiaría nada.



Si pueden vean este vídeo de Franco de Vita, escuchen la letra de la canción... Es perfecta para complementar lo que escribí.

Si me dieran a elegir una vez más, 
te elegiría sin pensarlo,
es que no hay nada que pensar.
que no existe ni motivo, ni razón
para dudarlo ni un segundo
por que tú has sido lo mejor, que tocó este corazón,
y que entre el cielo y tú yo me quedo contigo.


martes, 21 de marzo de 2017

¡Adiós a las dietas! Tips para una alimentación saludable

“Una alimentación saludable es aquella que es completa, equilibrada, suficiente y adecuada”, afirma Yadyra Cortés, nutricionista clínica. 

Las familias de hoy son cada vez más dinámicas, aventureras, comparten experiencias divertidas, apasionantes e incluso arriesgadas. Buscan sentirse plenas, especialmente las madres, quienes siempre tenemos como prioridad promover hábitos sanos para toda nuestra familia sin caer en estrictas dietas.

Mantener una alimentación saludable sin caer en dietas estrictas, es posible.  Por eso, Yadyra Cortés, nutricionista clínica quien adelanta charlas educativas sobre alimentación sana en colegios, nos brinda algunos consejos:

Porciones recomendadas en una dieta regular, según la función de los grupos de alimentos: 

1. Consumir alimentos constructores como: 

  • Huevos: 1 porción al día estaría bien. 
  • Carnes: ¾ porciones a lo largo de la semana. 

2. También incluir en el plato alimentos reguladores como: 

  • Verduras: comer 2 al día. 
  • Frutas: 3 al día. 
  • Cereales: 4 porciones al día. 
3. Y no olvides comer alimentos energéticos: 

  • Leguminosas: al menos 2/4 porciones al día. 
  • Tubérculos: 4 porciones al día. 
  • Pastas: 4 porciones al día. 

Tips de hidratación

1. Beber líquidos regularmente y no sólo cuando aparezca la sed.
2. Tomar líquidos antes, durante y después del ejercicio.
3. Beber un litro por cada kilo de peso perdido.

De acuerdo con Yadyra Cortés, nutricionista clínica “las bebidas a base de malta, además de hidratar, aportan vitaminas y minerales”. Tal es el caso de la nueva Pony Malta Plus, fortificada con zinc y vitaminas del complejo B, que aporta nutrientes para fortalecer el sistema inmune del cuerpo humano, también contribuye con el desarrollo de la creatividad, curiosidad, concentración y memoria.