Mi hijo ya cumple ahora dos años, ya es un hombrecito que está empezando a entender muchas cosas, normas, juegos, órdenes. Es un niño muy inteligente y me siento muy orgullosa de haber logrado esto hasta el día de hoy.
En primer lugar y así como comenta mi amiga @RadioCobain, el manejo con los abuelos aveces es intolerable, porque uno nunca quiere verse como la mala del paseo pero por dar una órden para que se cumpla, ellos desautorizan y mi pobre hijo termina pagando el mal manejo de la situación. Sé que los abuelos colaboran mucho sólo que es frustrante tratar de hacer lo mejor posible por criar a un niño ‘equilibrado’. Criar a un hijo sola (sin el apoyo físico y moral del padre) puede llegar a ser muy triste y hay que tener mucha más fuerza moral que si esa otra persona estuviera ahí presente.
Tener desde un principio a mi hijo sola me asustaba porque literalmente la responsabilidad de la crianza iba a ser mía y sobre mí recaía todo el peso de lo malo que sucediera - porque eso si, nunca la gente ve las buenas acciones -. Regañarlo cuando se debe, darle una orden específica y que se cumpla, determinar tiempo para jugar o para dormir son tareas difíciles que solo se logran con constancia y el hecho de no permitir que otras personas intervinieran en mis decisiones, incluso los abuelos, son de las mejores cosas que he logrado estando sola.
A pesar de tener ese conflicto con las personas más cercanas, creo que he tenido la fortaleza necesaria para que mi hijo se críe de una buena manera. Ser firme en las decisiones y ser un poquito más estricta hace que todas esas situaciones sean más llevaderas.
Una situación adicional que me pone a pensar de más, es el trato que podamos dar en la crianza el papá de mi hijo y yo. No estamos juntos y la comunicación no es realmente buena, y a pesar de que sólo comentamos sobre las cosas del niño me crea un cierto conflicto emocional saber cómo querrá el la crianza y cómo la quiero yo. Alguna vez comentando entre los dos me di cuenta que en muchas cosas no coordinamos respecto a cómo queremos ver a Eric en un futuro. Somos personas opuestas en el sentido de cómo vemos la vida, fuimos criados de manera muy distinta y no quiero tener problemas entre los dos simplemente por intentar comprarle una muda de ropa o escogiendo un colegio. Aunque presiento que si se va a generar un conflicto mayor al de un escenario normal intentaré dar lo mejor de mi por el bienestar del niño.
Lo interesante del asunto es que nadie está preparado para ser mamá o papá así se haya planificado un hijo. Todos los niños son distintos, uno es distinto y cada día que pasa con ellos a nuestro lado aprenden y aprendemos. Es increíble ver todo el progreso que uno como madre tiene día a día. Simplemente ese esfuerzo al final se ve recompensado viendo a nuestros hijos crecer.
mas sincero imposible amiga, tienes razón el manual no viene con los chiquis, es todo prueba y error. @cats_caliope
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